La Cámara Fotográfica

La Cámara FotográficaLa vida continuó como antes, con las ausencias de Beto y sus exiguos mensajes. Solamente las visitas de Guadalupe, el tío de Beto que vivía en Nueva York, hermano de su papá, dueño de la casa donde vivían, rompía la monotonía unas semanas, mientras permanecía en México. A diferencia de Beto era muy alegre y le gustaba escuchar. Había aprendido que la escucha es el veneno que una vez esparcido nadie puede resistir, deleita y a la vez somete. Así que Lili tuvo un interlocutor interesado en lo que ella contaba. En su primer visita Guadalupe estuvo muy interesado en conocer el origen y procedencia de su nueva sobrina, su interés era una mezcla de curiosidad y ciencia antropológica, le gustaba entender cómo y por qué se producían las circunstancias humanas, y como no queriendo la cosa, interrogaba a discreción. Fue así como supo la forma en que su sobrino y ella se habían conocido y cómo habían llegado hasta la casa de la abuela (así la nombraba también él, no obstante fuera de su propiedad), pero también la cuestionó sobre el origen de Yahir . Lili, reticente al principio, no quiso darle mayor detalle. Sólo después de varias semanas de conversaciones diarias y extensas, cuando Guadalupe (él le prohibió que le antepusiera la palabra tío) mostraba un verdadero interés por lo que había sucedido y sucedía en la vida y mente de Lili, le contó cómo llegó Yahir a su vida. El tío entendió sus vulnerabilidades y se solidarizó con su fragilidad sin hacérselo saber. Estas extensas pláticas tendieron ese puente de comunicación que abrió las puertas a las confidencias que los amigos comparten, esas vivencias que van formando el temple, la visión y las creencias a las que se ata cada persona para mejor vivir, y cuando son expuestas en el foro adecuado (una amistad, ese lugar común de justificaciones de errores y celebración conjunta de logros) se vuelven bastiones de la defensa de sus opiniones y gustos. Para Lili no fue complicado hablarle de tú a Guadalupe. A diferencia de su suegro Genaro, Guadalupe además de ser más joven, tenía una actitud que lo hacía verse menor a su edad. Su energía contagiaba. - Tal vez era lo que hacía falta en la casa - pensó ella. Una mañana Guadalupe apoyó a Lili en la entrega del niño a la escuela. En ausencia de Beto que nuevamente estaba de viaje, el tío se ofreció a llevar a Yahir. A su regreso como recompensa, ella preparó el almuerzo que tanto le gustaba al tío. Unos ricos chilaquiles verdes, muy picositos, con su huevo montado y los frijoles refritos con manteca. La cerveza y el café negro no podían faltar. Lili tomaba el café con leche, su gastritis no le permitía tomarlo solo. No obstante esa vez sucumbió al sabor de sus ricos chilaquiles, antojo que pagó con intensas agruras horas después. - Quiero comprar una cámara ? le dijo el tío, - ¿Me acompañas a Walmart? ? - Termino de levantar la cocina y vamos ? respondió con entusiasmo. Llevaron a Nancy en la carriola que el tío acababa de obsequiarles. Lili estaba muy agradecida por la generosidad mostrada por Guadalupe. - Beto es muy afortunado de tener un tío así - pensó. - ¿Cuál cámara me recomiendas?- exclamó el tío parado frente al aparador donde se exhibían un gran número de modelos. - No tengo idea, todas se ven igualitas, ¿por qué no le preguntamos al dependiente? - sugirió emocionada Lili al saber que su opinión era tomada en cuenta, aunque esta vez no podía aportar gran cosa. Después de las explicaciones del encargado, sólo tres modelos quedaron en la recta final. - ¿Ahora sí me vas a decir cuál prefieres? ? Y sin dudar un instante respondió: - ¡Ésa, la de la izquierda, la Canon!- Sin más por agregar, Guadalupe le indicó al encargado que se la llevarían. Fueron a las cajas, donde después de pagar recibió el ticket para recogerla en el mostrador de Servicio a Clientes.Ya en casa, Nancy había caído rendida y dormía en la carriola. El sudor perlaba la frente de Lili. La caminata bajo el rayo del sol la sofocó. - Subo a acostar a Nancy y a ponerme algo más cómodo para este calor ? comentó al tiempo que cargaba a la bebé en sus brazos. El tío se retiró a su departamento para refrescarse también. Sólo durante sus estancias temporales esta parte de la casa tenía uso, el resto del año permanecía deshabitada. Regresó al patio y esperó en la sombra el arribo de Lili. - ¡Lili, me tienes que ayudar con esto! ? Le gritó sosteniendo en alto la cámara recién adquirida. - ¡Voy, no tardo! ? se escuchó su voz desde lo alto - Esta familia es de puros mandones- dijo para sus adentros Se apuró a recostar a la bebé. La vio tan hermosa e inocente sobre la cuna. Sonrió, se puso unos shorts en vez de los jeans y cambió sus zapatos por unas sandalias.Al bajar las escaleras descubrió una mirada en el tío que nunca le había visto.- ¿Qué quieres que haga?- inquirió con una sonrisa - Pues ayúdame a entender el instructivo de uso ? Y extendiendo su mano, le puso el manual a su alcance. Ella lo tomó y empezó a leerlo. Se le facilitaba el uso de la tecnología y había desarrollado una cierta habilidad para descifrar esos instructivos. El calor aumentaba conforme el sol invadía todo el patio. - ¿No quieres sentarte para leerlo? Pásale a mi casa, tengo un agua de limón helada que me preparó mi mamá y ahorita nos caería como anillo al dedo.El comedor se convirtió en el sitio de estudio, Lili leía y confirmaba las instrucciones con la cámara que ya estaba en su posesión también.- Listo, ya quedó, ya puedes empezar a fotografiar- - Gracias mi niña, a ver ponte allá para ver que tal sales- - Ay no, que pena, estoy bien fachosa- - Naaa, estás bien chula, si por eso te escogió mi sobrino, ándale ponte allá en medio de la sala ? Lili obedeció un poco a regañadientes, el tío se había portado muy bien con ellos, en especial con ella. No podía negarle este favor. Guadalupe tomó algunas fotos, pidiendo a Lili que volteara para uno y otro lado, de frente, seria, ahora sonriendo, viendo para arriba, para abajo, como si estuviera muy triste. Lili posaba en todas esas posturas preguntándose a qué hora terminaría la prueba de la cámara.- A ver niña, ven a ver cómo quedaron- le dijo Guadalupe Revisaron las fotos guardadas en la tarjeta de la cámara. A Lili le gustaron un par de ellas. Se delató con el cambio de expresión en su rostro al descubrirlas. - ¿Te gustan?- - Pues la verdad sí- respondió mientras pensaba que no solamente le gustaban las fotos sino la cámara. Siempre había querido una, y ésta que habían escogido, aún más. - ¿Y qué opinas de la cámara? ¿te gustaría tenerla?-Lili no supo que contestar, pareciera ser que le había leído el pensamiento. - Pues sí, dijo con toda timidez ? - Entonces, es tuya ?Los ojos de Lili se abrieron casi del tamaño de su asombro. Nunca hubiera pensado poder tener una cámara así. Beto y ella vivían sin que nada les faltara, pero siempre se limitaban a lo justo para comer y vestir. Un lujo así estaba muy por encima de sus posibilidades. No se sentía merecedora de un obsequio así. - No, qué pena, si es tuya, tú la compraste con tu dinero ?- Pero para qué sirve el dinero si no es para compartirlo con la gente que se quiere y se admira .- Ay Guadalupe, ahora sí que me apenas. ¿Qué me vas andar admirando si soy una simple ama de casa . - Ni tan simple, tienes unas piernas muy lindas .- Tio,? Guadalupe - No sabía ya como dirigirse a él - ¿No se le hace ? o se te hace que te estás pasando? - A ver Lili, ¿te gusta o no? - Pues sí. - ¿Entonces? - Pues no sé.- Mira, para que no te sientas mal por el regalo, ¿Cómo me lo agradecerías?-- No sé, tú dime.- Mmmm, pues con algo relacionado con esta cámara.- No entiendo.- Quiero otras fotos tuyas.- Pero si ya tienes muchas.- No como las que quiero. Lili entendió en ese momento de qué se trataba todo ese bello comportamiento del tío, evaluó la situación, jamás tendría una oportunidad así y lo que le pedía no era sexo, en su escala de valores no era tan grave, entonces puso sus condiciones: - Pero sería solo en ropa interior, nada de desnudos, y Beto no se tiene que enterar. - De acuerdo, ¿podría tomarte unas solo con la tanga que se asoma bajo el short y tu cubriendo con tus manos tus bubis? Nuevamente evaluó la situación, la cámara lo valía ? - Bueno, pero sólo una de esas.Sin pensar más, se quitó blusa, short y sandalias - ¿Así?- - Así estás muy bien ? Por segunda vez posó en diferentes posiciones y culminó con aquella sin bra. - Ya. Ya cumplí - dijo con mirada coqueta. - Y cumpliste de maravilla, pero creo que tus senos son dignos de fotografiarse.- Ay tío, si quedamos que nada de fotos así.- Ándale, nada te cuesta, además ya vi que te gusta que te vean.Lili se supo desenmascarada, siempre le había gustado provocar a los hombres y vió que el tío Guadalupe no era la excepción, inclusive, su bulto bajo el pantalón ya daba muestras de su presencia.- Está bien ? respondió ella al tiempo que dejaba que sus tetas con los pezones ya encendidos se vieran. Su tanga empezó a humedecerse, era la primera vez que hacía algo tan audaz. Y quiso llegar más lejos.- ¿No me va a pedir que ahora me quite la tanga, verdad? ? preguntó sabiendo que su sugerencia velada iba a tener eco.- Pues ahora que lo mencionas, me gustaría tener fotos tuyas sin nada.- Está bien ? dijo dócilmente Lili al tiempo que se despojaba de la diminuta tanga que traía mostrando su sexo recién depilado.El efecto sobre el tío Guadalupe fue inmediato, su pene mostraba ya una gran erección, situación que excitó a Lili y pensó que, si el poder de su figura provocaba algo así, ¿qué pasaría si pasara a la acción?- Tío, que pena, pero estar desnuda me hace sentir cosas raras, como que se me humedece mi cosita ¿será normal?- Pues depende de que tanto se te humedece, ¿puedo tocar para ver y así poder decirte si es o no normal?- Ay tío, pero que no se entere Beto ?El tío dejó la cámara sobre la mesa y se acercó a Lili, sus manos acariciaron primero los senos desnudos de Lili como preámbulo a la penetración que sus dedos hicieron en la vagina húmeda y expectante de ella. Sin decir una palabra más, se bajó pantalones y calzones y con la verga bien parada hizo que la mano de Lili la agarrara. Lili no puso resistencia, mientras ya los besos del tío recorrían el cuello, pechos y terminaron en uno muy prolongado en la boca. Sus lenguas se encontraron, se acariciaban, se decían lo mucho que se deseaban. Y ella se puso de rodillas para lamer los huevos del tio y de ahí subir su lengua hasta la cabeza que ya dejaba salir lágrimas transparentes. Sus labios chuparon luego ese pene listo para penetrar. El tío se deshizo de su camisa y quedando desnudo la invitó a ponerse de pie con un ligero jalón de cabellos. La cargó por las nalgas y le metió el miembro que palpitaba de excitación hasta lo más profundo. Ella no pudo reprimirse y comenzó a gemir, suave, levemente pero terriblemente excitada. Las embestidas del tío eran cada vez más violentas, ella gemía más fuerte y en algún momento ambos soltaron un lamento que manifestaba su orgasmo. Las piernas del tío flaquearon y dejó a Lili nuevamente de pie frente a él. Ella sumisamente se volvió a arrodillar para limpiar con su lengua los fluídos que envolvían el pene del tío. Acto seguido, sin decir palabras, se vistieron.Guadalupe retiró la tarjeta SDC de la cámara y le entregó el equipo. Él se guardó cuidadosamente el trofeo en su bolsillo. Beto supo que el tío Guadalupe les había regalado a Lili esa cámara para que le estuvieran mandando fotos de la familia porque los quería mucho y le gustaba tenerlos presentes en imágenes.